Los desajustes en los días de vacaciones tienen consecuencias y la piel es una de las principales afectadas con el verano, el calor, la radiación y la mala alimentación. Por eso, en este artículo descubrirás cómo el comer frutos secos puede ayudarte a mantener tu piel protegida y sana, de manera que luzca tersa, luminosa y suave también en verano.